Así es como el ayuntamiento de Sta. Marta promociona los espacios de encuentro de vecinos
La última asamblea interna de ACUSAM del curso 2013/14 ha tenido de
todo. Empezando por los problemas y retrasos para realizar la
convocatoria. Siguiendo por el hecho de encontrarnos, toda vez ya
realizada la convocatoria, con la puerta cerrada del supuesto lugar
que nos habían asignado a la hora acordada.
Sin
ningún género de dudas podemos decir que el gran éxito, visto
desde el punto de vista neoliberal y más propio de otros tiempos, de
la corporación del Partido Popular en Sta. Marta de Tormes es la
desmovilizacion absoluta de la ciudadanía y de todas las
asociaciones que existen o podrían existir en el municipio.
En
Sta. Marta de Tormes el tejido asociativo ha desaparecido. Los
espacios de reunión y encuentro de los vecinos son cerrados durante
varios meses al año y cada vez sufren mayor restricción en su
acceso y libertad de uso para los ciudadanos. Si en las plazas
públicas de la localidad han desaparecido las arboledas, los
espacios de sombra y los bancos han pasado a ser unipersonales y en
direcciones opuestas evitando la conversación (y eso cuando los hay)
con los espacios de reunión, que el pueblo tiene, desde el fastuoso
nuevo ayuntamiento, hasta los distintos locales de actividades y los
antiguos cines que funcionan a modo de auditorio, se ha llevado a
cabo un proceso de laminado en su disponibilidad para con los vecinos
y asociaciones así como para sus necesidades asamblearias, pese a la
buena disposición de los funcionarios.
Pero
es que además, desde la corporación municipal se han encargado de
manera continua y eficiente de minimizar toda la actuación
asamblearia y asociativa. Primero, como he dicho ya, con la nula
disposición de los espacios municipales para las actividades que las
asociaciones puedan llevar a cabo. Y además, y como hemos podido
comprobar desde nuestra experiencia como ACUSAM, con las solicitudes
de subvenciones municipales para diversas actividades. En estas
solicitudes bajo unas condiciones que prácticamente reducen a lo
anecdótico e imaginativo los motivos para reclamar un dinero, que legítimamente debe de corresponder a las actividades vecinales,
puesto que cumplen funciones y ofrecen servicios y actividades que la
corporación municipal no hace, además les añaden una serie de
requisitos, y plazos que en algunos casos, como en el nuestro, nos
quitaban las ganas para solicitar estas ayudas que podían dinamizar
diversos procesos y actividades que queremos hacer de cara a Sta.
Marta de Tormes. Estos plazos, algunos de ellos absurdos (como el
hecho de solicitar una subvención para el ejercicio 2014/15, y sólo
poder presentar actividades hasta el 31 de diciembre de 2014, con el
requisito de la devolución si no se lleva a cabo) dificultan el
ejercicio proactivo de asociaciones y particulares que necesitan de
pequeñas ayudas económicas para realizar actividades que pueden ser
beneficiosas para el núcleo urbano, y que en algunos casos pueden
trastocar los réditos de las ganancias de centros comerciales de la periferia.
Limitados
tanto en los plazos, como en los motivos y proyectos sujetos a la
concesión de estas subvenciones municipales, además nos encontramos
con el en forma de papeleo y en el plazo más lesivo de todos:
el de presentación de la solicitud del proyecto, que puede hacer si
no se ha trabajado con previsión que cualquier solicitud pueda ser
fácilmente rechazada por la concejalía de economía, por cualquier
detalle erróneo o ausencia documental, fácil de producirse dado la
poca manga ancha para con los vecinos. Curiosamente, las peñas y
asociaciones de índole festivo, tienen hasta 7 días más para poder
solicitar ayudas económicas, para las fiestas municipales que se
desarrollan durante 7 días, y bajo unas condiciones de disfrute
mucho más abiertas que en el caso de las asociaciones que nos
dedicamos al bien común.
Como
decía al principio, ante la última asamblea interna de ACUSAM
solicitamos el espacio cedido por el ayuntamiento para las
asociaciones para la fecha y horas semanales a la que tenemos
derecho, y dentro del plazo estipulado. Pero lamentablemente desde el
ayuntamiento de Sta. Marta consideran que por le mero hecho de ser
verano, ya no se tiene porque tener a disposición de los vecinos y
las distintas asociaciones los espacios comunes (y además tenerlos
en buenas condiciones) de participación ciudadana, que recordemos,
son pagados para su mantenimiento y disposición con las aportaciones
impositivas de todos los vecinos, todos los meses del año.
Aún
así, nos concedieron otro espacio, pero lamentablemente nos
encontramos ante la puerta cerrada del centro de adultos a la hora
convenida, lo que nos ponía en un brete a la hora de desarrollar la
asamblea, tomando la decisión de acudir a la antigua plaza mayor
para poder sentarnos y dialogar sobre los asuntos pendientes de
ACUSAM.
Pero
no todo acaba aquí. Estábamos ya inmersos en la discusión del
orden del día, cuando el alcalde accedía a un establecimiento
comercial de la plaza. Pues sin ningún tipo de duda o vacile, nos
posicionamos ante la puerta del establecimiento para interpelar al
alcalde.
Y
lo hicimos porque llevamos casi 7 meses en los que el alcalde y su
corporación no ha atendido las propuestas de diálogo que desde
ACUSAM hemos lanzado, con el tema del autobús y su abusivo y déspota
servicio que estamos sufriendo todos los vecinos, como eje principal.
Es cierto, que en unas ocasiones, en el último mes, ha sido nuestra
agenda particular y personal, mediatizada por nuestros trabajos y
estudios, la que lo ha impedido, pero a su vez hemos expuesto una
total disponibilidad abierta a poder contactar con los elegidos en
calidad de representantes de los vecinos, por las tardes y en fin de
semana. Pero en esos momentos parece que los ciudadanos quedan sin
representación y sin interlocutor ante el que elevar sus
reclamaciones, protestas, alegatos y sugerencias.
Y
así esperamos durante 20 minutos para poder hablar con el alcalde y
expresarle en primer lugar nuestro desencanto por lo acontecido con
los espacios de reunión vecinal y porque habíamos acabado en ese
lugar para llevar a cabo una asamblea interna de la asociación. Y ya
aprovechamos inmediatamente después, para preguntarle directamente
sobre la última reunión extraordinaria del Consejo Rector ante las
últimas subidas y abusos por parte de las concesionarias en el
precio del autobús. Además, solicitamos su intermediación para
poder acceder como representantes de los vecinos en la próxima
reunión del Consejo Rector del Transporte Metropolitano del alfoz de
Salamanca, en Valladolid. En ambos casos encontramos la negativa, en
primer lugar porque debía comunicar lo acontecido en Valladolid en
la próxima comisión de transporte (el 28 de julio, cuando estamos a
un mes vista); y en lo segundo, ante la imposibilidad ya que el
consejo esta constituido y hasta su disolución en 2016, no se pueden
producir altas, bajas o modificaciones (queremos consultarlo). Y ya
por último para poder disponer de la documentación apropiada para
poder defender esta causa. Curiosamente esta documentación esta en
el ayuntamiento, se supone o debería ser así, en libre acceso para
cualquier vecino, pero podemos ir a consultarla o a que nos la
fotocopien, "cuando este yo", según nos dijo el alcalde.
Y
si, fue un escrache y fue improvisado. De hecho, si hubiéramos
tenido nuestra sala disponible no se hubiera producido. Fueron pocos
minutos de diálogo cordial con el alcalde, ante su indisimulada huida, en esa actitud tan de moda entre las celebrities, ya sean
políticos, deportistas o famosos sin oficio pero con beneficio, de
ni siquiera pararse ante sus interlocutores ya fueran periodistas, o
como en este caso simples vecinos empoderados y con voluntad e
intención de trabajar en el bien común.
Sólo
esperamos que este breve y casual encuentro, sea la antesala para
poder colaborar junto al ayuntamiento en recuperar sus funciones de
defensor de la ciudadanía y del interés general de los vecinos de Sta. Marta de Tormes.